EL SANTUARIO TAURINO MESÓN "EL COTO" CUMPLE
CUARENTA AÑOS
.jpg)
.jpg)
Y
claro, de tal palo tal astilla, Ramón, magnífico profesional de la cocina, fue
un novillero de éxito en los años cincuenta toreando en muchísimas plazas
compartiendo cartel con lo mejorcito de entonces. Pero si el toro era su
pasión, los fogones constituían su otra debilidad y como cocinero de lujo
trabajó en los mejores restaurantes hasta que decidió establecerse por su
cuenta y, al alimón con su hermano José, montó "El Coto", un lugar
emblemático, orgullo de la hostelería cordobesa que cuenta con una prestigiosa
y riquísima cocina.
Convertido
en un auténtico santuario taurino, como reclamo popularizaron el slogan
"El Coto, donde siempre hay un taurino". De verdad, entrar en este
establecimiento, es como visitar un museo taurino. Tiene bouquet y se respira
toreo del bueno. Aqui tiene su sede la peña "Finito de
Córdoba" y por eso las paredes estan colmadas de recuerdos del diestro del
Arrecife. Junto a un vestío de torear, grana y oro, cuelgan dos cabezas de toros,
una del hierro del Marqués de Domecq y otra de Arribas Sancho, ambos
estoqueados por el torero titular. Son imnumerables las fotos de Manolete que salpimentan este encantador
lugar. Igualmente carteles históricos y
otros objetos diversos componen la decoración que resulta muy agradable
invitando a compartir una tertulia ante una copa de vino y una exquisita tapa.
Este
lugar era de visita obligada para José Flores "Camará", apoderado de
Manolete . Tambien Rafael Sánchez "Pipo" gustaba de venir y degustar
sus tapas y buen vino. Todos los toreros cordobeses han estado en este
santuario alguna vez y de los foráneos José Fuentes, "El Soro",
Rivera Ordóñez, etc...la lista sería muy larga y no es cuestión de alargar este
escrito conmemorativo de un cumpleaños que a todos nos alegra, porque "El
Coto" es un referente en Córdoba de buena cocina, buen vino y
extraordinario ambiente.
El
Coto tiene instituido, desde hace 24 años, un trofeo que premia la mejor
actuación de un novillero en los festejos de la feria de Mayo. Es muy rigurosa
su adjudicación habiendo quedado desierto en bastantes ediciones. Entre otros
novilleros, lo lucen en sus vitrinas José Luis Moreno, Juan Serrano "Finito de Córdoba" y
Rafael González "Chiquilín".
Actualmente Ramón, el hijo de José, tomó el relevo del
negocio dando paso así a la tercera generación. Lleva mas de veinte años integrado
en el mismo y a la jubilación de su
padre y tío, se ha hecho cargo de los destinos de esta joya de las tabernas
cordobesas que tantas y tantas páginas de literatura han inspirado a través de
la historia.
Felicidades
y a cumplir muchos mas.-
No hay comentarios:
Publicar un comentario