UN DIA FELIZ

Muchas veces cuando nos preguntan: ¿Cual fué el dia mas feliz de tu vida?, muchos contestamos con fechas convencionales "El dia de mi primera comunión", "El dia de mi boda", "El dia del nacimiento de mis hijos". Unas veces es verdad que fueron dias felices, pero otras ni nos acordamos de ellos. Yo no se si este dia que voy a relatar fué el mas feliz, pero si uno de los mas felices y prolifero y que cada vez que miro las fotos, se me ensancha el corazón con los recerdos.
Estabamos en los ultimos dias del mes de Junio,del pasado año yo me encontraba en Córdoba, ayudando a mi amigo y compañero José Luis villafuerte en los trabajos Veterinarios. Se habia comprado Josed Luis un Todoterreno Hillux, camioneta, para trabajar y habia comprado por telefono Una clinica Movil para ponerla en el vehiculo. Se la habia comprado a otro compañero veterinario que vivia en Ribadesella (Asturias) y me dijo:
"Felix, vamos a ir a por la clinica movil,entre los dos vamos y venimos en el dia".Le conteste que cuando el quisiera que nos poniamos en carretera.
Habia sido deseo del padre de José Luis, Pepe Villafuerte, ir a pamplona por los sanfermines, hubiera deseado que José Luis hubiera toreado alli, pero al retirarse, le habia quedado esa espina clavada.
José Luis, me dijo, "¿Porque no aprovechamos y vamos tambien aSan fermin?, a mi padre le haria mucha ilusión". Dicho y hecho, organizamos el viaje, para el dia 10 de Julio se nos unió tambien francisco Javier, el hermano gemelo de José Luis y contratamos los hoteles, para pasar la noche del dia 9 en Miranda de Ebro y el dia 10 en Ribadesella. El dia 8, compramos pantalones blancos y camisetas blancas, así como pañuelos y fajas rojas, teniamos que ir perfectamente uniformados como mandan los cánones.
El dia 9 despues de comer, salimos, llegando a Miranda de Ebro, sobre las 10 de la noche. Salimos a dar una vuelta y a picar alguna cosilla y para las once y media, ya estabamos en las habitaciones.
El dia 10, alas cinco de la mañana, ya estabamos en el Hall del hotel, vestidos de blanco y con nuestro pañuelos y fajas rojas, salimos hacia Pamplona, donde llegamos a las siete de la mañana. Dejamos el coche en un aparcamiento y nos fuimos, para la Plaza del Ayuntamiento  Nadie que no haya vivido esta fiestas, puede hacerse una idea, de las sensaciones que alli, se sienten. Pamplona era un herviderode gente,unos que nose habian acostado,otros que se levantaban, para ver el encierro, todo con mucha alegria y fraternidad. Nosotros mirabamos a todos sitios como turistas japoneses, contagiados de la alegria de la fiesta, nos metimos donde entran los corredores. La idea nuestra era, que cuando sonase el cohete, don José (Padre) y francisco javier (hermano) Se metiesen entre las tablas y se quitasen del peligro, lo que no sabiamos es que una vez que suena el cohete, los policias no te dejan que entres por los tablones y debes permanecer fuera hasta que pasen los toros. Toda la calle, estaba llena de gente, muchos de ellos americanos, que han cogido la fiesta de san fermin, como algo muy entrañable para ellos. Buscamos un sitio, mas a menos seguro, donde pensamos, que los toros pasarian rapidamente y no muy cerca y alli, dejamos al padre y al hermano. José Luis y yo marchamos andando hacia los corrales, unos cien metros. cuando ibamos andando oimos el cohete, enseguida el tumulto que venía corriendo, giramos sobre nuestros talones y a correr tambien, hacia la plaza del Ayuntamiento, donde habiamos quedado en reunirnos. Corrimos por el lado izquierdo de la calle, viendo como uno tras otro y como una exhalación pasaban los toros a poco mas de dos metros de nosotros. Junto donde nosotros paramos, un toro colorao, en la otra acera, corneaba a un mozo, hiriendolo grave, pero enseguida lo dejó y siguió corriendo. ese mismo toro unos metros mas adelante corneo a otro mozo, produciendole la muerte.Cuando escuchamos el cohete que daba por finalizado el encierro, nuestros corazones, no se a que ritmo la tirian, todos nos dabamos la enhorabuena por haber salido bien y yo aproveche a hacerme una foto con una giri, que tenía la cara blanca y el corazonse le salia del pecho.

Nos fuimos a la plaza de toros y estuvimos un rato viendo las vaquillas, dando revolcones en la arena. Salimos y nos fuimos por las calles de Pamplona, en la Plaza del castillo, nos tomamos nuestro desayuno de chocolate con churros, estumos como un par de horas mas en pamplona y nuevamente en ruta. A la hora de comer, nos encontrabamos en Santander, en la Playa del Sardinero, comimos y descansamos un poco sentados en un banco a la sombra en unos jardines junto a la playa. Unas señoras que pasaron, al ver nuestra indumentaria, comentaron "Mira esos, vienen de San fermin, menuda borrachera que deben de llegar encima",no sabian las buenas mujeres que lo mas fuerte que habiamos tomado era Coca-cola . Despues de descansar un rato en los jardines, salimos hacia Ribadesella, donde llegamos sobre las siete de la tarde. Llegamos al hotel que teniamos reservado, nos dimos una ducha y cambiamos la indumentaria, y nos fuimos a ver Ribadesella, preciosa localidad costera, y por último fuimos a hacer lo que llevabamos en mente desde que salimos de Córdoba, comernos una enorme y sabrosa "mariscada.".

Puede haber dias felices en nuestras vidas, pero en la mia, como este de feliz y de prolifero muy poco, creo que ninguno de los cuatro lo olvidaremos nunca.